Few sounds transcend time and space quite like the driving pulse of Afrobeat, and few artists, for that matter, have defined their own domains quite as profoundly as Tony Allen—the very beat of Afrobeat itself. In 2011, Allen recorded one of his inimitable rhythmic dialogues as part of the Afrobeat Makers Series for the Parisian imprint Comet Records. Charged with the same fervour for uninhibited expression that defined his trailblazing career, Tony Allen’s drumming, free from convention and charting its own course, emanates a cadenced stream of consciousness that speaks its own truth.

If Allen’s language was his beat, then on this record, La BOA—La Bogotá Orquesta Afrobeat—becomes his latest and most fitting interlocutor. What began as a tribute—a song named after Allen—now feels like the prelude to a deeper dialogue in a meeting that seems more like fate than mere happenstance.

Led by producer Daniel Michel, the ever-evolving band has spent over ten years embodying the fluid, transformative spirit of Afrobeat, imprinting it with their distinctly Colombian sensibilities. From Casa Mambo in Bogotá, Michel’s Mambo Negro Records has become a cornerstone of Colombia’s underground scene championing Afro-Colombian and independent music throughout that time.

Across this LP, Allen’s recordings lay down the canvas upon which La BOA paints its own vision of Afrobeat—raw and expansive, locking step with his drum tracks while building around the unmistakable blueprint of their Colombian rhythms: exuding Caribbean beat, rolling with Pacific groove, and, above all, shaped by the rarefied air of the Andean melting pot that is Bogotá. What ensues is an enduring conversation that crosses eras, borders, even life and death—a celebration of the passing of the baton and the boundless nature of Afrobeat as a genre that refuses to settle. Where the beat of Lagos meets the brass of Bogotá, so too La BOA meets Tony Allen.

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Pocos sonidos trascienden el tiempo y el espacio como el potente pulso del afrobeat, y pocos artistas han definido sus propios dominios tan profundamente como Tony Allen, el latido mismo del afrobeat. En 2011, Allen grabó uno de sus inimitables diálogos rítmicos como parte de la Afrobeat Makers Series para el sello parisino Comet Records. Cargado del mismo fervor por la expresión desinhibida que definió su carrera pionera, la batería de Tony Allen, libre de convencionalismos y trazando su propio rumbo, emana una cadenciosa corriente de conciencia que dice su propia verdad.

Si el lenguaje de Allen era su ritmo, en este disco, La BOA—La Bogotá Orquesta Afrobeat—se convierte en su más reciente e idóneo interlocutor. Lo que empezó como un homenaje—una canción que lleva el nombre de Allen—ahora se siente como el preludio de un diálogo más profundo en un encuentro que parece más un destino que una mera casualidad.

Liderada por el productor Daniel Michel, la banda, en constante evolución, lleva más de diez años encarnando el espíritu fluido y transformador del afrobeat, imprimiéndole su marcada sensibilidad colombiana. Desde Casa Mambo en Bogotá, Mambo Negro Records de Michel se ha convertido en una piedra angular de la escena underground colombiana, promoviendo la música afrocolombiana e independiente durante todo este tiempo.

A lo largo de este LP, las grabaciones de Allen establecen el lienzo sobre el que La BOA pinta su propia visión del afrobeat: cruda y expansiva, al compás de sus pistas de batería y construida en torno al inconfundible modelo de sus ritmos colombianos: exudando ritmo caribeño, rodando con el groove del Pacífico y, sobre todo, moldeada por el aire enrarecido del crisol andino que es Bogotá. El resultado es una conversación duradera que atraviesa épocas, fronteras e incluso la vida y la muerte, una celebración del paso de la batuta y de la naturaleza ilimitada del afrobeat como género que se niega a conformarse. Donde el ritmo de Lagos se encuentra con el metal de Bogotá, también La BOA se encuentra con Tony Allen.